Cuida tu intimidad con Dios

Creo firmemente que esta enseñanza será de gran ayuda para los pastores "Siervos del Señor" que están expuestos siempre a ayudar a otros, pero necesitan llenarse de Dios para poder dar a la gente la ayuda espiritual que ellos necesitan. De manera que adiciono este mensaje que no es de mi autoría, sin embargo me a ayudado mucho a entender la importancia de tener una intimidad con Dios por medio de las disciplinas de abstinencia que aquí el autor las llama de "desenganche" y las disciplinas de la participación con otros que son las de "enganche". Disfruten la lectura y el estudio de este documento del Dr. Misionero Evangélico Phillip Train.

Recordemos:

1.      Que como siervos de Dios quienes somos es más importante que lo que hacemos.

2.      Que los siervos de Dios deben examinar su propia vida antes de presentarse a otros. (I Tim.4:16)

3.      Que la intimidad con Dios es una relación cercana, privada, y personal con Dios a través de la cual hay un mutuo afecto y una creciente familiaridad con Dios basada en un cúmulo de experiencias con Dios.

INTIMIDAD CON DIOS

I.                   La intimidad con Dios debe ser el centro de nuestra vida espiritual (Dt 7:9; Sal 46:10).

A.    La base teológica para una intimidad con Dios (Ef 2:7; 1 Jn 3:1; 1 Co 1:9; Rm 8:15-16; Jn 14:1-3; Sal 63:1-2; Fil 3-10).

B.     El estar con Dios es más importante que lo que hacemos para Dios (Jn 14:9; 15:5).

II.                La intimidad con Dios se basa sobre el conocimiento que tenemos acerca de Jesús

(Jn17:6). Es vivir la vida como El la viviría si estaría en nuestro lugar.  No es aumentar más esfuerzo religioso, sino es entrenar más sabiamente (Fil 3:10; Mt 6:33).

III.             Las disciplinas espirituales son aquellas actividades que nos ayudan a vivir la vida que Jesús modelo para nosotros.

A.    Nuestro cuerpo puede ser entrenado para la justicia o para la injusticia (Gá 6:7-9; Rm 6:19).  La carnalidad apunta a una distorsión del potencial que Dios nos ha dado.

B.     Las disciplinas de desenganche (abstinencia)

1.      La soledad reconoce la total dependencia de Dios.  Mengua nuestro apuro y nos guía otra vez a Dios (Mt 14:23; Mr 1:35; 6:30-32; Sal 139:23-24).

2.      El silencio es dejar de hablar para permitir que Dios nos hable. Muchas veces el hablar tanto apunta a nuestro vacío espiritual (1 S 30:6).

3.      El ayuno demuestra una total dependencia de Dios (Mt 4:4; Zac 7:5).

4.      La sencillez nos ayuda a simplificar nuestras vidas y valora nuestra relación con Dios (He13:5; Fil 4:11-13; 2 Co 11:3).

5.      La castidad nos ayuda a tomar control de nuestra sexualidad (1 Co 7:5).

6.      La discreción o el secreto nos ayuda a hacer las cosas para Dios y no por los aplausos (Mt 6:1).

7.      La disciplina de sacrificio es prescindir de aquellas cosas que nos traen seguridad (Mr 12:42; Gé 22:8). 

C.     Las disciplinas de enganche son las actividades en las cuales participamos activamente como ser el estudio de la Biblia, la adoración, el servicio, la oración,  la comunión, la confesión y pedir perdón, y la sujeción que nos permite oír la voz de Dios a través de otros.

¿Qué te ha ayudado en tu intimidad con Dios en el pasado?

¿En qué área te gustaría practicar más una intimidad con Dios?

      

Fuente bibliográfica: Apuntes extraídos del texto editado por el Misionero y Psicólogo Phillip Traen