10 febrero 2021

La "Seño" Elizabeth


Quiero dar gracias al Señor porque me ha dado el privilegio de tener a grandes personas como mentoras y mentores, personas que me enseñaron con su ejemplo de amor hacia mi persona como es el amor de Dios. Esta ves quiero citar a mi querida "Seño" Elizabeth Maag, una hermana que llegó mas de 40 años desde Zuiza a Bolivia para trabajar como misionera, levantando una nuevo obra para el Reino De Dios. Llegó a Guayarameerin _ Beni, con el deseo intenso de ser una misionera ejemplar y ayudar al prójimo mediante el apoyo en la iglesia y el trabajo con el discipulado en niños, adolescentes y jóvenes de la iglesia y comunidad. 

Cuando tenia como 9 años llegué a conocer a esta gran mujer que ahora es casada con el Pastor Cesar Achimo y radican en Riberalta - Beni. En aquel entonces, yo asistía a la Iglesias Cristiana Evangélica de la UC.E. que tenía su iglesia en el centro de Guayaramerin. Un día nos quedamos en la Iglesia Berea para asistir a sus programas de discipulado con grupos de adolescentes, donde lideraba la Seño Elizabeth, me gusto tanto y por esa razón decidí asistir a los cultos de escuela dominical. Mi madre me concedió ese deseo después de conocer a la Seño, luego de ver mi gran interés por asistir a la iglesia. 
En la Iglesia Berea, enseñaban maestras de otro país, como la seño Elizabeth, Regula y otras que trabajaron en la librería evangélica "La Palabra", lanzando en las vacaciones invernales y finales invitación a los campamentos para niños. 

Allí sentíamos el cariño de nuestras maestras, los días de culto nos llevaban a otro lugar cálido y seguro donde nos enseñaban con amor la Palabra de Dios, y proveían un rico refrigerio junto a los materiales de enseñanza y aprendizaje de la Palabra de Dios. Con el tiempo la Seño Elizabeth organizo una caminata para nuestro grupo de chicos donde tuve la oportunidad de participar. Fue un hermoso tiempo de aprendizaje, conocer el bosque, ser parte del grupo de exploradores de los "Sscaus Antorchas Evangélicas" en ese entonces fue un regalo precioso de mi Padre celestial. La señor nos enseñó varias cosas de su cultura, las que aprendí escuchando y observando muy atentamente. Después participe de un coro de adolescentes con la ayuda del hermano Letanio Menacho practicamos varios coros evangelísticos y de adoración para cantar en las plazuelas de nuestra comunidad. Luego organizaron un viaje a Riberalta para grabar un cassete de música que sabíamos cantar, fuimos al Estudio Logos para grabar nuestra música siendo participe de esa gran experiencia a la edad de 11 años.  

Recuerdo que en unas vacaciones mi madre me inscribió para ser parte de un campamento donde asistí por primera ves solita sin mi madre, fue una doble experiencia, la de dejar a mi madre y mi hermana, e ir con dolor de la separación a un lugar desconocido pero donde sabia muy bien que iba aprender algo de Dios. Recuerdo que lloré despidiéndome de mi madre, pero ese fue mi primer campamnto donde fue rebasada de grandes lecciones de amor, me saque el premio de la mejor campamentista. Y disfrute de la compañía de mis maestras y compañeras del campamento cultivando amistad y compañerismo, en el arroyo de "Nueva Canaán" lugar del campamento fue donde aprendí a nadar, ese fue un regalito Plus.

Me gozo en el Señor por haber sido parte de ese grupo de jóvenes a quienes discípulo la Seño Elizabeth con gran cariño y amistad y amor del Padre, los hermanos de ese entonces que colaboraron con la Seño Elizabeth fueron Saul Peralta, Alejandro Zabala, Sulema Zabala, y otros que no recuerdo sus nombres, sin embargo agradezco a Dios por haber direccionado mi vida hacia un camino de enseñanza de las cosas de Dios a mi temprana edad. 

Ya en el Seminario Bíblico Berea estando allí en calidad de esposa del Rector, nos visitó la Hermana Elizabeth Maag junto con su esposo, y me animo a seguir el trabajo como ella lo había hecho, animándome a levantar un grupo con niños así como ella lo había hecho durante mucho tiempo. Me animo a colocar incluso el mismo nombre que nosotros tuvimos en ese entonces. ¿No es genial esta mujer? ¡Si!, es muy hermosa por dentro y por fuera, la amamos mucho, todo aquel que la conoce llega a amarla con todo su corazón. 

En estos días atrás, tuve el privilegio de conocer a su hermana Priscilla Maag donde me indico que era su hermana, y ella me obsequio esta hermosa foto de mi su hermana, mi "Seño", y dije "voy a escribir algo en honor a ella". Yo sé que va a leer mi nota, y quiero decirle por este medio Millón de gracias querida Seño por tan grande amor para la gente que toca con su vida y ministerio. Dios colme su vida de múltiples bendiciones, que siga siendo ese canal de bendición, entregando el amor del Padre a todo aquel que se acerca a usted. Dios le de vida y mucha salud para seguir ayudando a los que la necesitan.

Imagen: Fotrografia obsequiada por Priscilla Maag


1 comentario:

  1. Que linda historia!
    Para nosotros como familia Romay, es un gran ejemplo de mujer, consejera y con convicciones claras. Y como ECAMM,(Escuela Misionera) ella siempre fue y es parte de ese equipo que vela la integridad y la necesidad del equipo.
    Definitivamente ella y su esposo Cesar son grandes amigos y servidores de la misión.

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